Shen suele traducirse por espíritu, mente, psiquismo, ... En fin, por una serie de términos, más bien confusos, y que tienen en ocasiones connotaciones culturales que los hacen difíciles de asimilar. Parte de esta confusión es inevitable: en chino, ‘Shen’ significa eso y muchas otras cosas más.
En medicina china, Shen representa, al menos, Mente, Espíritu y Vitalidad, entendiendo por cada uno de ellos:
- Mente: Pensamiento, conciencia, percepción, comprensión, autoconciencia, memoria, inteligencia, atención, lucidez, intuición, capacidad de alerta...
- Espíritu: conjunto de los aspectos psicomocionales
- Vitalidad o expresión externa: ese ‘algo’ difícil de definir, pero fácil de detectar, que se aprecia en características como el brillo de la mirada, la expresión, postura, coordinación, reflejos...
En medicina china, los aspectos psíquicos son:
- Hun: Alma (o espíritu) Etérea
- Po: Alma (o espíritu) Corporal
- Yi: Intelecto o Pensamiento
- Zhi: Voluntad o Perseverancia
- Shen: Conciencia, actividades mentales y expresión externa
Cada uno de estos aspectos psíquicos tiene características, funciones y asentamiento propios. De todos ellos, el más importante es el Shen, el conjunto mental que se asienta en Corazón y que de algún modo dirige y refleja a los demás. Este Shen, o “Espíritu del Corazón” es directamente responsable de muchas actividades mentales, entre otras:
- pensar - memoria - conciencia
- conocimiento - sueño - inteligencia
- sabiduría - ideas - imágenes y metáforas (cognición)
- percepción (gobierna los sentidos)
A pesar de que el Corazón es el centro de todos los aspectos del Shen, los demás órganos (sobre todo los Zang) también tienen su papel, más especializado, en las actividades mentales.
Los órganos que se relacionan con los distintos aspectos mentales son:
- Hun: Alma (o espíritu) Etérea - HIGADO
- Po: Alma (o espíritu) Corporal - PULMÓN
- Yi: Pensamiento - BAZO
- Zhi: Voluntad - RIÑÓN
- Shen: Shen - CORAZÓN
El papel preponderante corresponde al Shen de Corazón, resumen y coordinador de los demás.
Las características y funciones de cada uno de los otros aspectos son:
- Hun: Alma (o espíritu) Etérea
Se define como ‘el ir y venir del Shen’. Es el aspecto proyectivo, sutil, el más móvil entre las distintas manifestaciones del Shen. Tiene su asiento en el HIGADO, donde se arraiga sobre todo en sus aspectos Yin y Xue. En sentido amplio, se corresponde con el concepto ‘alma’ de la cultura occidental, y, según los chinos, entra en el cuerpo después del nacimiento, y después de la muerte se eleva al ‘Cielo’. Cielo en China es un estado de energías sutiles y no materiales, sin connotaciones positivas ni negativas y, por tanto, no tiene nada que ver con el concepto de “Cielo” de la cultura cristiana.
Se le atribuyen básicamente SIETE funciones:
- Gobierna el sueño y los sueños
- Permite la fluidez de las actividades mentales
- Permite el equilibrio emocional
- Se relaciona con los ojos y la vista
- Es responsable del valor y la osadía
- Influencia la capacidad de planificación, el sentido y dirección de la vida
- Se relaciona con la Mente (a veces se describe como "los movimientos de la Mente"). Puede considerarse la herramienta del Shen.
Es la parte responsable de la relación de uno mismo con los demás. Sus funciones dependen mucho del estado y abundancia de la Sangre, así como de la fluidez de los movimientos del Qi.
En estado normal, se manifiesta como comunicación, relación, entusiasmo, imaginación, valor. Sus patologías más comunes son:
- La afección por el Yang de Hígado, que provoca la cólera.
- La Insuficiencia de Sangre de Hígado, que provoca depresión y miedo.
- El Estancamiento de Qi de Hígado, que perturba su movilidad.
- Po: Alma (o espíritu) Corporal - Alma instintiva
El Lingshu lo define como ‘la entrada y salida del Jing’, lo que lo relaciona íntimamente con la vida corporal. Tiene su asiento en el PULMÓN. Es la contraparte Yin a Hun (considerado como Yang). Puede definirse como “la parte del Shen indisolublemente unida al cuerpo, y se entierra con él tras la muerte”. Se describe como la manifestación de la Esencia (Jing) en la esfera de las sensaciones y sentimientos.
Sus funciones principales son:
- Desarrollo en la infancia (equilibrio, primeras sensaciones)
- Control de la sensibilidad corporal: tacto
- Se relaciona con llorar
- Es la actividad básica reguladora de todas las funciones fisiológicas a través de las funciones propias del Pulmó
- Responsable de la respiración (Mediante la respiración accedemos al Po y, por tanto, al Shen.)
- Equilibra y asienta a Hun
- Controla el ano (la excreción, relación con Intestino Grueso)
- Protege al Shen de las influencias externas
Es pues, responsable de la vida y funciones vegetativas y de la vida como individuo. Su patología es la tristeza.
- Yi: El Pensamiento o Intelecto
Reside en el BAZO. Sus bases son el Qi y la Sangre postnatales, es decir, depende del funcionamiento del Bazo. Sus funciones principales son aquellas ligadas al intelecto, o pensamiento consciente:
- Responsable del pensamiento aplicado, capacidades intelectuales como capacidad de estudio y de concentración
- Memorización y ordenación de datos concretos. Memoria a corto plazo.
- Generación de ideas concretas, conceptualización.
La Insuficiencia de Bazo se manifiesta a este nivel frecuentemente por dificultad de concentración, pérdida de memoria inmediata y por un exceso de reflexión, preocupación, ‘darle muchas vueltas a las cosas’, que en el extremo puede convertirse en obsesiones.
- Zhi: La Voluntad
Reside en el RIÑÓN. La palabra china tiene al menos tres significados:
- Indica ‘memoria’. Se relaciona más con la memoria a corto plazo
- Significa ‘voluntad’, capacidad de acción, de poner en marcha las propias ideas.
- A veces se usa de modo parecido a Shen: se habla de los Cinco Zhi, que son los mismos aspectos del Shen: Hun, Po, Shen, Yi y Zhi
Sus funciones se relacionan fundamentalmente con:
- La fuerza, el carácter, la determinación, perseverancia, voluntad, en suma, la capacidad de acción y realización.
- La voluntad.
- Las relaciones consigo mismo.
Su insuficiencia se manifiesta en apatía, desinterés, depresión, y propensión a enfermar, así como en incapacidad de realizar lo planeado.