La microbiota intestinal desempeña un papel crucial en el desarrollo del sistema nervioso durante los primeros años de vida. Investigaciones recientes sugieren que hay diferencias significativas en la microbiota intestinal entre personas con Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) y aquellas sin este trastorno.
Un estudio realizado en 314 niños, de los cuales 59 (18,8%) tenían TDAH, ha arrojado datos importantes sobre la relación entre la microbiota intestinal y el desarrollo del TDAH:
Resultados clave del estudio:
- Diversidad Filogenética y Composición Bacteriana: Una menor diversidad filogenética y una composición bacteriana proinflamatoria a los 6 meses de edad se asociaron con un mayor riesgo de desarrollar TDAH.
- Cepas Asociadas al TDAH: A un mes de edad, 18 cepas bacterianas y 3 cepas fúngicas se asociaron con el desarrollo de TDAH. A los 6 meses, el número de cepas bacterianas asociadas aumentó a 51 y las cepas fúngicas a 3.
- Asociación Temprana: La investigación proporciona evidencia longitudinal sobre cómo las características de la microbiota intestinal infantil están vinculadas al desarrollo posterior del TDAH.
El estudio concluye que la microbiota intestinal en los primeros años de vida puede tener un impacto significativo en el desarrollo del TDAH en preadolescentes, llenando un vacío importante en la literatura existente sobre este tema.
Para más información, puedes leer el artículo completo aquí: “Early-life gut microbiota and attention deficit hyperactivity disorder in preadolescents”.